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UG 30 – TRANSFORMACIÓN DE RESIDUOS Y DESINFECCIÓN DE IMPACTO CERO

nación
Uganda
duración
12 meses
ámbito
Ambiente
completo
No
budget
2072 € / 1247 €
UG 30 – TRANSFORMACIÓN DE RESIDUOS Y DESINFECCIÓN DE IMPACTO CERO

Lugar del proyecto

El St. Daniel Comboni Spiritual Centre es un Centro espiritual dirigido por las Hermanas Misioneras Combonianas en la colina de Namugongo, un barrio periférico de la capital Kampala. El Centro se encuentra cerca del Santuario de los Mártires Católicos de Uganda y ofrece un lugar para la meditación, para encuentros y para la formación espiritual continua de quienes buscan un lugar tranquilo para la reflexión y la oración.

Del complejo forman parte un huerto, para contribuir a la autosuficiencia del Centro, y un gran parque que permite a los huéspedes disfrutar del espectáculo de la Creación: las flores, las plantas, el canto de los pájaros, la ausencia de ruidos.

Descripción del proyecto

Para contribuir a la conservación de la naturaleza y el mantenimiento sostenible de este lugar encantador, la hermana responsable, Sr. Rosemary, cuenta con la colaboración de un experto en agroecología, apasionado por la conservación del medio ambiente, que enseña a jardineros y aprendices algunas técnicas de jardinería y horticultura sostenibles y comparte su conocimiento sobre la eliminación de residuos.

En efecto, el mayor desafío al que nos enfrentamos es el del tratamiento de los residuos cotidianos, en un país donde no está prevista la recogida selectiva de basura. Para afrontar este desafío, el primer paso fue clasificar los diferentes tipos de residuos en grandes contenedores, separando así material orgánico, papel, plástico y vidrio. Sin embargo, se planteó de inmediato el problema de cómo eliminar las colecciones individuales para poder finalmente deshacerse de ellas.

Primero, nos centramos en los desechos orgánicos. Tratándose de un tipo de residuos de tipo orgánico-ácido, distribuirlos directamente sobre los macizos de flores habría resultado perjudicial para la vegetación. Pero nuestro experto ha encontrado la solución: utilizar ese material para preparar el Bakashi, es decir, un abono orgánico que se realiza mezclando los residuos con cáscaras de café y polvo de carbón, según una "receta" tradicional que permite preparar en pocas semanas un estiércol ecosostenible idóneo para el huerto y para las flores.

Para tratar los residuos de papel, que antes se recogían en una gran pila que luego se quemaba, ahora se utiliza la pirólisis, un tipo de combustión que limita la liberación de dióxido de carbono a la atmósfera. Con esta técnica, la basura se quema lentamente creando polvo de carbón (biochar), que se puede utilizar para producir fertilizantes orgánicos y briquetas de carbón. El plástico se entrega a una mujer que vende las botellas, mientras que para el vidrio todavía tenemos que averiguar cómo eliminarlo.

Actualmente en el Centro se preparan varios tipos de abono, entre ellos el derivado del estiércol de vaca; pero lamentablemente no disponemos de un cobertizo ad hoc para los fertilizantes biológicos en el que llevar a cabo el proceso de descomposición del estiércol. En este momento, a falta de un espacio dedicado, todo el material orgánico se deja descomponer en el suelo del antiguo gallinero. Por lo tanto, las hermanas necesitan una cabaña específica para procesar el estiércol, con el fin de poder liberar el gallinero para iniciar en ese espacio un pequeño proyecto de cría de pollos Kuroiler.

Para proteger la vegetación de las malas hierbas, en el recinto rocían una solución preparada con orina animal y cenizas. Esta solución repele los insectos que caen sin morir y aporta una miríada de nutrientes, lo que se traduce en una mayor productividad de los cultivos hortofrutícolas y en una amplia floración de las plantas ornamentales. Para poder utilizar este tratamiento también en los árboles frutales - mangos, naranjas y aguacates, que son bastante altos - reduciendo así los abortos florales y la caída prematura de los frutos, se necesita urgentemente un pulverizador de motor específico con amplio radio.

Objetivos

  • Diferenciar y eliminar los residuos del Centro de manera sostenible, creando un círculo virtuoso de consumo y reciclaje
  • Ofrecer un ambiente sano y acogedor para los huéspedes del Centro en busca de espiritualidad
  • Optimizar y aumentar las cosechas de frutas y hortalizas del Centro
  • Promover e implementar el espíritu de la Encíclica Laudato Si' del Papa Francisco

Beneficiarios

Directos: huéspedes, inquilinos, personal, aprendices y vecinos del St. Daniel Comboni Spiritual Centre Namugongo

Indirectos: la sociedad

 

 

 

 

Hermana referente del proyecto: Hna Rosemary Nassali

Costos del proyecto

Material: cemento, arena, ladrillo, clavos, etc
€ 1.191,10
Madera y láminas galvanizadas para cubiertas
€ 118,40
Mano de obra
€ 550,00
Compra de pulverizador
€ 212,50
Total
€ 2.072,00